Su sobrenombre, “doña Onça” (doña jaguar), lo acuñó su marido Jefferson, pero sin duda basta una mirada o una frase de esta formidable mujer para entender que su espíritu es tan fiero y tenaz como el de un jaguar. Janaina Rueda, la chef propietaria de O Bar da Dona Onça en São Paulo, obtuvo hace un mes el premio American Express Icon otorgado por Latin America’s 50 Best Restaurants.
Un reconocimiento aún más especial en este año tan difícil, en el que la chef Rueda ha dejado a menudo su cocina para ayudar a los más necesitados, entendiendo la comida como una herramienta solidaria por encima de todo y luchando siempre por algo más grande. Al recibir el premio, Janaina comentó: “Mi esperanza es que este espacio ayude a concienciar sobre temas importantes, como el debate sobre la diversidad y la búsqueda de una gastronomía democrática y cada vez más inclusiva. El momento de cambiar es ahora”.
Imagen Mauro Holanda
Para la chef Rueda, comer bien es algo que debería esta al alcance de todos. Por eso en su restaurante se sirven de forma informal pero cuidadísima platos tan suculentos como el estofado de pollo “galinhada”, mientas que en su restaurante más sofisticado, A Casa do Porco (cuarto en la lista de Latin America’s 50 Best Restaurants 2020), donde cocina con su marido Jefferson Rueda, el menú degustación cuesta menos de 30 dólares de persona.
Fine Dining Lovers tuvo el placer de entrevistar a Janaina Rueda tras la ceremonia de los Latin America's 50 Best Restaurants. Esto es lo que nos contó sobre ella y sobre su cocina.
Ha luchado por la ayuda del gobierno y mientras tanto daba de comer a los necesitados y se ponía del lado de los que habían perdido sus trabajos. ¿Qué significa para usted recibir tal reconocimiento en un año en el que el compromiso social adquiere un valor aún más importante dada la crisis global provocada por la pandemia?
No he hecho nada de eso sola, nos hemos unido a varios grupos y juntos hemos luchado por obtener ayudas para el sector. En uno sólo de estos grupos hay 240 chefs, pero yo participo en muchos otros con representantes del comercio minorista, financiero, económico, etc. Participamos activamente en grupos de debate sobre políticas públicas. Es muy gratificante, excitante… ¡e intenso! (dice riendo) recibir un premio como éste y poder darle voz al Centro de Sao Paulo, donde se encuentra mi comunidad. Espero que este espacio ayude a sensibilizar sobre temas importantes, como el debate sobe la diversidad y la investigación de una gastronomía cada vez más inclusiva y democrática. Nuestra misión es ayudar a los más vulnerables. ¡“Quien no lucha está muerto”, como dice la gran líder del MSTC (Movimiento de los Sintecho del Centro), Carmen Silva, a la que admiro mucho!
¿Cómo ha cambiado su vida y su trabajo después del coronavirus?
Para mí, lo que más ha cambiado es mi forma de ver la vida, la naturaleza, los seres humanos, la lucha… espero que de ahora en adelante el mundo tenga más empatía, armonía, salud y capacidad para evolucionar. Pero creo que lo más importante para mí en este momento es el refuerzo de la unidad familiar y de la unidad con nuestros compañeros de trabajo y con nuestros amigos.
Carne de Onça Mauro Holanda
Afirmó que todo lo que aprendió lo hizo en la 'escuela de la vida'. ¿Por lo tanto, a quién le dedica este premio?
Sí, mi escuela es la vida, mi experiencia viene de la calle. Este reconocimiento ha llegado a través de la naturaleza, de la energía que une a las personas y de mantenerme fiel a mis convicciones. Quiero seguir luchando por aquello en lo que creo junto a mi familia y no puedo dejar de darle las gracias a mi marido, Jefferson Rueda, que me anima tanto, y a mis hijos, que me ayudan mucho.
Su local se llama "O bar da dona onça". No hay duda de que usted es una fuerza de la naturaleza, pero ¿cómo surgió el sobrenombre de "mujer jaguar"?
Fue mi marido Jefferson el que me puso ese apodo. Además, me encantan los estampados animales y siento mucho respeto hacia este animal tan brasileño. Como ellos, siempre estoy atenta, respeto la naturaleza y sólo “ataco” si me provocan, ¡o cuando tengo muchísima hambre! (dice riendo). Me pongo de muy mal humor si tengo hambre, necesito comer urgentemente para sentirme bien. Siempre estoy observando, como los jaguares, para mí el animal más importante de la fauna brasileña.
Figado em tiras Mauro Holanda
Desde 2014 ha estado a la vanguardia del cuidado de la nutrición infantil, llevando su batalla directamente a las escuelas. ¿Cómo ve el futuro de la alimentación? ¿Cree que las nuevas generaciones serán más sensibles y atentas al tema?
¡La lucha no se detiene nunca! Repito: ¡quien no lucha está muerto! Soy una mujer optimista, tengo esperanza y fe. Si un país quiere alimentar al mundo primero debe alimentar bien a sus hijos. Debemos educar el paladar para que la gastronomía sea reconocida y admirada por su generosidad, ser cocineros al servicio de la educación. Las clases y los recreos son el mejor lugar para hablar de un tema que tiene un impacto enorme en el mundo.
¿Qué significa cocinar para usted?
¡Cocinar es amar al prójimo y estar a su servicio!
¿Todavía tiene un sueño secreto? ¿Quiere contárnoslo?
¡Me encanta cantar! ¡Puede que algún día abra un karaoke! (dice entre risas).