De color verde encendido y forma muy similar a la de los alquequenjes, el tomatillo no es realmente un tomate. ¿Pero, entonces, qué es y cómo se usa en la cocina?
Para empezar, este fruto —sí, el tomatillo es, en realidad, una fruta— pequeño y esférico pertenece a la familia de las Solanacee y se conoce como "tomate mexicano". Es una variedad nativa de México, donde se produce en grandes cantidades, aunque también se cultiva en suelo estadounidense, sobre todo por su gran resistencia a las condiciones meteorológicas.
El tomatillo tiene una piel fina, parecida al papel, que se quita fácilmente, al igual que la de los alquequenjes, y un corazón más bien seco, de sabor más agrio y menos dulce que el de los tomates maduros. Tiene una pulpa poco acuosa y densa, de color brillante que se oscurece levemente durante la cocción, y es un fruto que hace muy bien a la salud: protege la vista, el corazón y la piel, y es bajo en calorías y rico en fibras.
Tomatillo en la cocina: usos
Al igual que los tomates normales, el tomatillo se utiliza en la preparación de salsas, principalmente picantes, ya que suavizan su acidez y son perfectas para acompañar una generosa porción de tacos. No obstante, el tomate mexicano también puede prepararse entero —frito o asado— o cortado en rodajas y salteado.
¿Algunos ejemplos? La salsa di tomatillos grillados es magnífica, mientras que la de tomatillos crudos resulta más agria, pero es igualmente sabrosa. Perfecto para preparar curry o para agregar a las vinagretas gracias al toque ácido, el tomatillo es un ingrediente versátil, que puede dar mucho color a vuestras recetas. Ya sea que acompañe vuestras parrilladas, junto con pimientos y cebollas, o que se sirva en el chili, el tomatillo siempre queda bien y da resultados deliciosos. Vale la pena probarlo también sobre tostadas, agregando, por ejemplo, algún ingrediente cremoso, como requesón o queso feta con un hilo de aceite de oliva.
Salsa de tomatillo: la receta
¿Tenéis curiosidad y queréis usar el tomatillo en la cocina? Empecemos por lo básico: la salsa de tomatillo. Este vídeo (en inglés, pero muy fácil de comprender) os enseñará a hacer un una combinación explosiva (y spicy) perfecta para sorprender a vuestros amigos en un aperitivo de primavera, quizás con una buena tostada, elemento imprescindible para combinar con esta salsa:
Tomatillo violeta: qué es
Imagen flickr.com/minvervah-jasonwilson
Existe también otra variedad de tomatillo, perfecta para dar color a vuestras recetas: el tomatillo violeta. Esta variedad tiene, en realidad, las mismas características que la variedad normal (aunque es más difícil de conseguir) y puede ser el ingrediente perfecto para un gazpacho andaluz, para colorar una sopa o para servir en el desayuno con huevos revueltos. Otra receta superrecomendada es la de la salsa morada, vegana y exótica.