El cebollín es una planta que habitualmente se utiliza para cocinar, y que le agrega a las comidas un suave sabor similar al de la cebolla. Se la conoce también como cebollino o ciboulette, por su habitual uso en la gastronomía francesa. Su nombre científico es allium choenoprasum, ya que pertenece a la familia de las aliáceas, grupo de plantas donde también se encuentran la cebolla, el ajo, el puerro, entre otras. El cebollín también tiene la particularidad de poder ser cosechado en cualquier momento del año y, además, es muy sencillo su cultivo doméstico, ya sea en una pequeña huerta o en una terraza.
El cebollino es utilizado para condimentar muchísimos platos ya que aporta un gusto similar al de la cebolla pero con un toque de ajo, y al mismo tiempo la sensación es mucho más delicada, resaltando de esta manera otros ingredientes de una forma elegante y no invasiva.
A diferencia de la cebolla, el cebollín es una planta mucho más pequeña, de hojas verdes, finas, alargadas y huecas por dentro, que pueden medir hasta 30 cm de largo. Además no hace falta cocinarlo para consumirlo y puede durar en la nevera hasta una semana. La principal diferencia reside en el sabor y en el tipo de uso que se le suele dar a cada verdura. El cebollín o cebollino es mucho más apropiado a modo de condimento y la cebolla suele ser la base de muchas recetas y platos, la mayoría de las veces, cocida.
Si quieres conocer los diferentes tipos de cebolla, puedes encontrar más información aquí.
Tipos de cebollín
La familia de las Amarilidáceas, donde se encuentran diferentes plantas bulbosas como el ajo, la cebolla, el cebollín o el puerro, es amplia y diversa. Es por eso que también existen diferentes tipos de cebollín, cada uno con su particularidad y toque especial.
El cebollín común es ideal para ser utilizado en sopas y ensaladas, ya que se puede consumir crudo. Sus hojas son huecas y con forma de púa, y en los primeros meses de verano, antes de su cosecha, la planta del cebollín florece con un hermoso color lila.
El cebollino chino o de ajo es muy utilizado en la cocina asiática, ya que aporta un sabor más similar al del ajo. Sus hojas son un poco más grandes, pudiendo alcanzar hasta 60 cm de largo. Entre fines de verano y principios de otoño se la puede ver florecida con unas lindas flores blancas. Además, es una planta que se esparce rápidamente y hasta suele ser considerada una maleza.
El cebollín gigante siberiano en apariencia es similar al cebollín común, pero su sabor es mucho más fuerte y sus hojas son más grandes, siendo así una planta más frondosa.
Por último, el cebollino de ajo de Siberia (o cebollino azul) se distingue de los demás justamente por ese color particular azulado de su follaje y por su color rosado cuando la planta está florecida.
¿Cuáles son los beneficios del cebollino?
El cebollín es una planta que puede aportar muchos beneficios a la salud, gracias a que es rico en vitaminas, minerales, fibra y ácido fólico. Ayuda a regular los niveles de colesterol en sangre y colabora también con el buen funcionamiento del sistema circulatorio.
Al ser considerado un antioxidante natural, el cebollino es muy bueno para prevenir la proliferación de algunas bacterias y hongos, y es también un excelente aliado para combatir gripes y resfríos.
Gracias a todas estas cualidades naturales, el cebollino es una gran complemento para acompañar muchas recetas así como también para mantener un estilo de vida saludable.
¿Cómo se puede conservar el cebollino?
Así como muchas plantas aromáticas se echan a perder rápidamente, lo mismo sucede con el cebollín. Para conservarlo por más tiempo y así aprovecharlo al máximo en la cocina, hay algunas recomendaciones que pueden ser útiles. Lo más importante es mantener el cebollino en un lugar fresco, como la nevera, y con su envoltorio original, si es posible. Como también es necesario que conserve algo de humedad, otra opción es envolver el cebollín en papel de cocina previamente humedecido y así introducirlo en el frigorífico. Por último, otro secreto para no desperdiciar ni un poco de esta planta, es mantenerlo congelado. Lo puedes cortar en pequeños trozos o picarlo, y así tendrás disponible pequeñas porciones cada vez que quieras utilizarlo.
Conoce más en Cómo congelar el cebollino en casa
Recetas con cebollino
El cebollín o ciboulette es un excelente complemento para una amplia variedad de platos y comidas. La sutil mezcla de sabor a ajo y cebolla realza gustos y aporta un toque distintivo a tu receta favorita.
Por ejemplo, el chef Karlos Arguiñano nos propone una simple receta de sopa fría de calabacín y mango, para la que sólo necesitas: 2 calabacines, 2 mangos, 1 patata, 1 cebolla, 1 cucharada de sésamo negro, aceite de oliva virgen extra, sal y, por supuesto, cebollín. Tritura la patata cocida en agua y los calabacines salteados con la cebolla, sazona la mezcla y deja reposar la crema en la nevera hasta que esté bien fría. Luego pica finamente el cebollino para salpicar la sopa ya servida en un plato.
Lee el paso a paso de esta fresca receta en Sopa fría de calabacín y mango por Karlos Arguiñano.
La zanahoria también propone una combinación perfecta de sabor con el cebollín. Siguiendo esta receta de crema de zanahoria, podrás obtener un plato sabroso y saludable en muy pocos pasos. Empieza triturando un puerro y una cebolla, con apenas un poco de aceite de oliva. Por otro lado, cuece durante 25 minutos 6 zanahorias y 1 patata mediana en agua o caldo, agrega un poco de sal y, cuando las verduras estén listas, tritúralas también y haz una mezcla con la cebolla y el puerro. Regula la textura de la crema según tu propio gusto y, para completar la preparación, agrega el cebollín picado y unas semillas de lino. Conseguirás un excelente plato fresco e ideal para las temporadas de verano.
Sigue las instrucciones detalladas de la crema de zanahoria aquí.