Tener experiencia en barismo resulta de enorme utilidad. A algunos les permite percibir unos ingresos flexibles mientras estudian en la Universidad o facilitar su transición a trabajos más lucrativos. Pero también puede ser muy rentable, ya un buen barista puede llegar a ganar un sueldo de cinco cifras. Naturalmente, nada puede sustituir a la experiencia, pero asistir a una buena escuela de barismo podría ayudarte a llegar más lejos.
Cómo convertirse en barista profesional
Como en cualquier materia, la escuela puede ayudarte a arrancar, pero el verdadero aprendizaje empieza en el mundo real. No creas que sólo porque te gusta ir de bares te va a gustar trabajar en uno. Sí, puede ser divertido, pero habrá momentos en los que seas la única persona del bar que no lo esté pasando bien. Ser barista puede resultar estresante, pero hay personas a las que se le da bien. Descubre si eres una de ellas antes de gastarte el dinero en una escuela de baristas profesionales.
Busca un puesto de ayudante de bar
Seguramente la mejor forma de aprender barismo sea solicitar un puesto como ayudante de bar. Un ayudante de bar es básicamente la “persona para todo” del negocio. Realizan tareas como lavar vasos, rellenar botellas y cortar las limas. No les sirven a los clientes ni preparan los combinados, pero es una forma rápida de aprender cómo funciona un bar.
Si prestas atención te familiarizarás con distintas marcas de bebidas, con los términos típicos de los baristas y con los distintos utensilios y equipos que usan. Con el tiempo, sin duda aprenderás a preparar cócteles observando a tus compañeros más experimentados.
Adquiere experiencia en un bar
Otra opción es buscar trabajo en un restaurante con bar (los llamados “gastrobares”). Dichos bares ponen el acento en la comida y en el servicio de mesa y suelen ser menos estresantes, por lo que ofrecen grandes oportunidades para poner en práctica la profesión. Las cadenas de restaurantes también suelen ofrecer buenos programas formativos: al menos para empezar o incluso para ascender en el escalafón.
Estos trabajos también pueden proporcionarte oportunidades formativas. Si demuestras tu valía es posible que encuentres a un barman experimentado que te acoja bajo su ala. Seguramente la mayoría de los barmans estarán encantados de enseñarte en las horas tranquilas. Pase lo que pase, recuerda que debes ser paciente. No vas a convertirte en Harry Craddock de un día para otro.
Sólo si estás seguro de que ésta es la vida que quieres deberías empezar a plantearte ir a una escuela de barismo. En tal caso, tendrás que decidir qué quieres obtener de ella. ¿Simplemente quieres aprender a gestionar un bar o quieres convertirte en un auténtico mixólogo?
¿Debería matricularme en una escuela de barismo o coctelería?
¿Cuál es la diferencia entre barismo y coctelería o mixología? Son palabras que se usan indistintamente, pero hay diferencias importantes.
Mientras que normalmente un barista prepara los cócteles mientras interactúa directamente con los clientes, un coctelero o mixólogo es alguien que crea cócteles originales o desarrolla los ya existentes (por ejemplo, creando un Bloody Mary propio para un restaurante o dándole un giro al Martini clásico para promocionar una nueva marca de ginebra).
La mixología sería la ciencia de los cócteles. Los mixólogos deben saber mucho de bebidas e ingredientes (como claras de huevo o amargo de Angostura) y de cómo interactúan los distintos sabores. También ayuda conocer la historia de los cócteles y mantenerse al día de las tendencias del sector.
Naturalmente, hay grandes puntos en común entre el papel del barista y el del coctelero. No sólo es posible ser ambos, sino que es muy común. Aunque los mixólogos pueden trabajar entre bambalinas, por ejemplo como asesores del menú de cócteles, a menudo ocupan el puesto de barista jefe.
Las 5 mejores escuelas de barismo del mundo
European Bartender School
A pesar de su nombre, la EBS tiene sedes por todo el mundo e incluso una escuela de barismo online. Se describen como “el líder global en formación de baristas” y no es del todo exagerado. Sin duda es la escuela de barismo más grande del mundo, pero, ¿realmente es la mejor?
Fundada en 1999, respaldada por varias marcas de bebidas importantes y con un certificado reconocido a nivel mundial, es difícil discutir con los 7.000 baristas que estudian cada año en sus 28 escuelas. Podrás estudiar hasta cuatro semanas en vibrantes ciudades, en la playa o en la montaña, pero también tienen escuelas en la destilería de Glenfiddich y en el legendario lugar de nacimiento del tequila y el mezcal, Jalisco.
Spirit Lab
Otra escuela de barismo que afirma ser la mejor del mundo es la Spirit Lab de Londres. Ofrecen cursos intensivos de 3 días que lo abarcan todo, desde atención al cliente hasta mixología. Es una opción excelente para perfeccionar tus habilidades en poco tiempo y, si vives y trabajas en Londres, es muy fácil adaptarlo a tu horario laboral.
New York Bartending School
La escena nocturna de Nueva York hace de ella un lugar ideal para estudiar barismo. Además, acoge una escuela que entiende que no todo el mundo aspira a lo mismo en esta profesión. Tanto si estás empezando de cero como si estás desarrollando tus habilidades como coctelero o incluso quieres convertirte en sommelier (camarero experto en vinos), seguro que la New York Bartending School tiene el curso que buscas.
The Mixology Academy
Si la New York Bartending School te pilla lejos, échale un vistazo a la Mixology Academy. Con sede en Roma, ofrecen una gama formativa igualmente amplia, desde cursos para principiantes y baristas para empezar con tu propio bar hasta cursos avanzados de mixología, naturalmente.
Columbia Bartending School
Hay que reconocerlo: puede que ésta sea la mejor opción disponible. La Columbia Bartending School forma parte de la Universidad de Columbia y lleva más de medio siglo formando a barmans. Sí, has leído bien: puedes aprender a llevar un bar en una escuela de la Ivy League.