El mango es una fruta tropical de origen asiático, más en concreto, su procedencia se sitúa en el noroeste de la India y el norte de Burma (la antigua Birmania), en las laderas del Himalaya, y posiblemente también en Sri Lanka (antiguo Ceilán), donde se encuentran algunas variedades silvestres.
Es el fruto del árbol Mangifera indica, perteneciente a la familia de las Anacardiáceas, a la que también pertenecen el anacardo o el pistachero.
Su cultivo se realiza desde tiempos prehistóricos, y algunos textos sánscritos, donde la existencia de este árbol se menciona por primera vez, cuentan que hace 6.000 años ya era conocido y apreciado por los hindúes. Su cultivo se fue extendiendo por zonas de clima tropical y subtropical de todo el mundo gracias a la labor de los monjes budistas y de los comerciantes persas, portugueses, españoles e ingleses.
Los portugueses introdujeron su cultivo en el sur del continente africano, las costas de Brasil y la Isla de Barbados, mientras, los españoles impulsaron su cultivo en las colonias tropicales en el continente americano. En épocas posteriores, el cultivo del mango se extendió por América Central y Estados Unidos, y empezó a hacerse un hueco en Europa. Hoy en día se cultiva sobre todo en la India (que abarca dos tercios de la producción mundial), Indonesia, Florida, Hawái, México (el principal país exportador del mundo) y muchos más países, destacándose las plantaciones cada vez más importantes que existen en España, concretamente en las Islas Canarias, y en Málaga y Granada, cuyo clima es ideal para su cultivo.
Existen aproximadamente 50 variedades de mango, que se clasifican por tamaño (en pequeñas, grandes y medianas) y por color (en verdes, amarillas y rojas). Los tres tipos principales son el mango Indio, el mango Indochino y Filipino y el mango Florida.
Una curiosidad: se cuenta que Siddharta Gautama, Buda, alcanzó la iluminación bajo un mango, al que desde entonces se le llama "el árbol de la sabiduría" o "bodhi".
8 propiedades y beneficios del mango
Previene el cáncer
Los betacarotenos presentes en el mango contribuyen a prevenir diversos tipos de cáncer, entre ellos, el de próstata, el de colon y el de piel. Además, el mango contiene ácido ascórbico, terpenoides y polifenoles, conocidos por sus propiedades preventivas del cáncer, y es rico en Vitamina C, un potente antioxidante que, al proteger las células del daño causado por el envejecimiento, atenúa el riesgo de crecimiento cancerígeno. En último, contiene pectina, una fibra soluble, cuyo consumo ayuda a prevenir la formación de células cancerígenas en el sistema gastrointestinal.
Previene enfermedades respiratorias
Los betacarotenos también ayudan a prevenir las enfermedades respiratorias, por ejemplo, el asma.
Previene enfermedades cardíacas
Gracias a su alto contenido en fibra, vitaminas y potasio ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares.
Mejora la salud ocular
Por su alto contenido en vitamina A, ayuda a prevenir la ceguera. El consumo regular de mango previene la ceguera nocturna, los errores de refracción, el ojo seco, el ablandamiento de la córnea y el ardor en los ojos; además, contiene la zeaxantina, un antioxidante capaz de filtrar parte de los rayos de luz azul que dañan los ojos. Este antioxidante protege la salud visual en general y previene la degeneración macular, enfermedad ocular que empeora con la edad.
Protege la salud de la piel y del cabello
La vitamina A también es necesaria para el crecimiento de piel y cabello y para estimular la producción de sebo, que tiene la función de hidratar y lubricar el cabello. Asimismo, la vitamina C estimula la producción de colágeno, el componente estructural más importante de la piel y del cabello.
Ayuda contra la diabetes
Algunos estudios apuntan que las hojas de mango consumidas en infusión ayudan a reducir los niveles de insulina en la sangre. Además, el índice glucémico del mango es bajo, con lo cual su consumo ayuda a reducir los niveles de azúcar en la sangre.
Es beneficioso para la anemia
El mango es rico en hierro y contiene vitamina C y enzimas que favorecen la absorción del mismo, por lo tanto, su consumo es beneficioso para aquellas personas que padecen anemia o que necesitan incrementar el aporte de hierro, como las mujeres embarazadas o las que necesitan suavizar los efectos de la menopausia.
Mejora la salud digestiva
El mango contiene enzimas que favorecen la digestión y alivian la acidez estomacal. Además, al ser rico en fibras, previene el estreñimiento.
Información nutricional de mango
El mango es una importante fuente de Vitaminas C, A y E, tanto que una pieza de unos 200 g cubre las necesidades diarias recomendadas de vitamina C en un adulto, el 30% de las de vitamina A y el 23% de las de vitamina E. Además, es rico en betacarotenos, potasio, selenio, magnesio, hierro, ácido fólico y cobre. Contiene también pequeñas cantidades de vitaminas del grupo B y de otros minerales, como yodo, calcio y zinc.
7 recetas con mango
El mango es sin duda un ingrediente estrella de muchos postres y las siguientes recetas no hacen más que corroborar este aserto. Y si quieres combinar la delicadeza del mango con un sabor más contundente, prueba esta tarta mousse de chocolate blanco y mango, ya verás cómo el sabor del mango combina a la perfección con el chocolate blanco.
El mango también puede dar mucho de sí como acompañamiento de platos salados. Es el caso de esta receta de pollo en salsa de mango, donde el mango se encarga de otorgar al pollo un delicioso toque agridulce. Este manjar tropical también marida estupendamente con el lomo. Prueba esta receta de lomo de cerdo bañado en salsa curry con pasas y mango, una perfecta mezcla de sabores y texturas.
Una forma quizás más atrevida de aprovechar esta deliciosa fruta consiste en preparar una sopa de mango con melocotones de azafrán. Es superfácil de preparar y su original sabor te sorprenderá. Y finalmente, no nos olvidemos de los más pequeños de la casa, que estarán encantados de saborear estos ricos polos de mango y leche condensada, que, sin duda, harán la delicia de mayores y pequeños.
Otras frutas tropicales o exóticas
El mango es una de las frutas tropicales más conocidas y consumidas; sin embargo, hay todo un mundo de sabores exóticos por conocer y experimentar y es posible que, aunque seas un apasionado de las frutas tropicales y hayas probado bastantes, te queden muchas más por descubrir. Pues, no esperes más. Sumérgete de lleno en el maravilloso mundo de la fruta exótica y descubre todo lo que hay que saber sobre fruta de la pasión, durian, kiwano, carambola, pitaya, chirimoya, guayaba, lichis o papaya.