El kimchi es una asombrosa preparación coreana fermentada. Sabroso y liviano, puede acompañar muchísimos platos diferentes, que sean orientales o no, y puede servirse solo como entrante, en frituras, como guarnición de platos de carne o simplemente con un poco de arroz: el kimchi queda bien con todo.
La receta tradicional del kimchi requiere mucha paciencia, pero esta infografía de The Online Grill la simplifica y la hace accesible incluso a los principiantes.
Necesitaréis 10 ingredientes diferentes y un par de días para tener vuestro kimchi casero listo para comer.
Como sabéis, el plato requiere la fermentación y, para ponerla en marcha, la col o la berza debe ponerse en salmuera durante aproximadamente 24 horas antes de agregar los demás ingredientes. Es precisamente el proceso de fermentación el que le da al plato esa nota levemente picante que a todos nos encanta.
Una vez vistos todos los ingredientes (algunos de los cuales pueden sustituirse, como el kochukaru) deberéis comenzar por la col.
- Para preparar vuestro kimchi debéis cortar la col al medio, colocarla en un cazo grande y cubrirla por completo de sal. C’è un passaggio in meno, perchè nella versione tradotta il punto 1 e 2 sono diventati uno solo, dato che il risultato era più naturale così.
- Agregad bastante agua caliente para sumergir la col.
- Cubrid con papel transparente y dejad reposar durante entre 12 y 24 horas a temperatura ambiente.
- Después deberéis colar toda el agua y enjuagar con agua fría.
- Llegados a este punto, podéis colocar todos los demás ingredientes y mezclar.
- Agregad la col y mezclad con las manos hasta amalgamar todo.
- Colocad vuestro kimchi bien comprimido en botes de cristal de 2 litros.
- Dejadlo en un lugar seguro y bastante templado durante aproximadamente 24 horas. Finalmente, abrid el bote y dejad salir el gas. Colocadlo en un lugar fresco durante al menos 48 horas antes comerlo.