Una auténtica "droga" al otro lado del océano, donde se consume más de un kilo al año por persona, y un alimento aún poco conocido en Italia pero que se está abriendo paso en muchas cocinas por su versatilidad a la hora de preparar aperitivos y bocatas.
Es verdad que a menudo la mantequilla de maní que se vende en los supermercados no es muy sana y, hay que reconocerlo, encima es cara. Por eso, para no renunciar a los placeres de la mantequilla de maní, te presentamos la receta definitiva (o casi). Hacer la mantequilla de maní en casa es fácil, se necesitan muy pocos ingredientes y es casi obligatorio si quieres comer esta tentadora crema sin renunciar a una dieta sana y equilibrada.
En el siguiente vídeo te explicamos el procedimiento con anacardos, pero los pasos a seguir con los maní son prácticamente los mismos.
Mantequilla de maní casera: la receta
- 2 tazas de maníes pelados y tostados (puedes sustituirlos por anacardos)
- canela
- aceite de girasol
Introduce los maníes en el vaso de la picadora, añade la canela y el aceite y tritúralo todo.
En otras recetas se aconseja añadir azúcar, miel o agave: depende de lo ligera y sana que quieres que sea tu crema.
Cómo comer la mantequilla de maní
En un bocadillo, como manda la tradición estadounidense, en hamburguesas gourmet para darles más sabor o como acompañamiento de crudités, como en la siguiente vídeo receta (más o menos como harías con el hummus). También está delicioso en el desayuno con fruta o añadiéndoselo a batidos energéticos.