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La llegada del otoño es una perfecta ocasión para preparar como parte de nuestras recetas uno de los platos italianos más clásicos, que es el risotto. Como muchas de las recetas que llevan arroz como parte de sus ingredientes, siempre es importante saber qué variedades de arroz se pueden utilizar, y el risotto no es la excepción. Así también sabemos que existen muchos tipos de setas comestibles, sobre las cuales ya os hemos contado en otra ocasión. Pero ahora preparaos porque en este artículo os vamos a enseñar a hacer un delicioso risotto de setas que os hará maravillar por su sabor y su textura cremosa.
El primer paso para cocinar esta receta es preparar los 300 gramos del arroz arborio, que será el ideal para el risotto. En caso de no conseguir esta variedad, el risotto también se puede hacer con el arroz tipo bomba, el cual es muy fácil de encontrar en todos los supermercados. Lo importante es utilizar un arroz con buena cantidad de almidón. Si se utiliza un tipo de arroz largo, como por ejemplo el basmati, no se logrará la textura necesaria para el risotto.
Con el arroz ya seleccionado, se debe proceder a hacer caldo de verduras. El caldo será la base fundamental de vuestro risotto, por eso es muy importante preparar uno bien sabroso. Podéis hacer un caldo casero con las verduras de vuestra preferencia, o para hacerlo más rápido, también se puede utilizar uno de los caldos en polvo o cubos que ya se consiguen preparados. Es de suma importancia que el caldo esté bien caliente al momento de hacer el risotto, por eso, se debe comenzar calentándolo en un primer momento.
Mientras el caldo se va calentando, es momento de empezar a picar los ajos y la cebolla en cubos bien pequeños. A su vez, se tiene que lavar bien las setas y los champiñones, y cortarlos en rodajas finas. Reservar todos estos ingredientes.
En una sartén añadir un chorro de aceite de oliva y calentar a fuego medio. Una vez el aceite esté bien caliente, bajar el fuego e incorporar los ajos picados. Se deben sofreír un poco antes de los otros vegetales, aunque sin dejar que se quemen. Una vez los ajos estén un poco dorados y blandos, se deben agregar los champiñones y setas. Añadir sal y pimienta, remover un poco y dejar cocinar. Todos los ingredientes irán tomando color y perderán un poco de agua. Cuando estén los ingredientes dorados y blandos, apagar el fuego y reservar.
En otra sartén se debe sofreír la cebolla picada. Para ello, añadir un poco de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva. Calentar todo a fuego medio bajo y añadir la cebolla cuando la sartén esté bien caliente. Añadir a la cebolla una piza de sal. Cocinar hasta que tome un color transparente. Cuando se logre transparentar todo, apagar el fuego y reservar.
En una olla añadir una cucharada de aceite y llevar a fuego medio. Una vez el aceite esté caliente, añadir los 300 gramos de arroz. Remover durante un par de minutos para que comience a transparentarse y largue el almidón. Cuando el arroz esté brilloso y más transparente, añadir los 150 mililitros de vino blanco. Remover bien y dejar cocinar unos minutos hasta que el alcohol del vino se evapore.
Añadir ahora las setas previamente preparadas al arroz que se está cocinando y remover bien para que se mezclen todos los ingredientes con el arroz. Luego, es momento de comenzar a añadir el caldo previamente preparado y bien caliente. Se deben añadir unas 3 tazas de caldo a la olla y remover bien todo. Es importante tener en cuenta que, uno de los secretos para lograr un risotto bien cremoso, es no dejar de remover nunca y añadir caldo cada vez que se va evaporando. Cuando se evapore el líquido, añadir una taza más de caldo y repetir este proceso hasta que el arroz esté listo.
Una vez el arroz está listo, solo queda agregar el queso parmesano rallado y una cucharadita más de mantequilla, y remover bien todo una vez más. Esto dará más cremosidad y sabor al plato. Ahora sí, vuestro risotto de setas está listo para ser servido y disfrutar.
Estamos seguros de que vais a probar en casa este clásico plato de la cocina italiana, ya que es fácil de preparar y también muy delicioso. Lo importante es tener paciencia en su preparación y no dejar de añadir caldo cuando sea necesario y no dejar de remover en ningún momento, para así obtener un plato bien cremoso y que no se pegue a la olla o la sartén. Si os ha gustado este risotto, os invitamos a conocer otras recetas que hemos preparado para vosotros como por ejemplo el risotto de gallineta, el arroz venere, el arroz a banda al estilo alicantino, y hasta incluso cómo hacer un arroz blanco perfecto. Por supuesto, hay más, ya que si os gustan también los platos con setas, no podéis dejar de conocer los secretos sobre cómo cocinar unas setas de membrillero.
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