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Nutritivos y sabrosos, son unos huevos en salsa de tomate: descubre cómo prepararlos en casa y disfrútalos con una buena rebanada de pan.
Si lo que se estabais buscando es un plato nutritivo a base de huevo como ingrediente protagonista, entonces habéis llegado a la receta perfecta. Se trata de los famosos huevos en salsa de tomate, también conocidos como shakshuka, que quiere decir “todo mezclado” en Israel. Este es un plato de origen oriental, típico en Jerusalén, aunque también en el resto de la región, y que ha trascendido fronteras sirviéndose en muchos restaurantes del mundo. La receta consiste en escalfar huevos en una salsa de tomate frito acompañada de otros vegetales, todo dentro de la misma sartén o cazuela, hasta que los huevos estén en su punto. Es un plato vegetariano muy fácil de preparar y en esta guía os vamos a enseñar cómo hacerlo y que os quede como la verdadera y original receta.
Para comenzar a preparar los huevos en salsa de tomate o shakshuka, lo primero que se debe hacer es pelar y cortar los ajos en láminas. Una vez se tengan las láminas de ajo listas, se deben colocar en una cazuela o sartén con apenas un poco de aceite de oliva, y dejar dorar los ajos un poco.
Mientras los ajos van tomando su color, es momento de cortar la cebolla en pequeños dados y agregarla a la sartén junto a los ajos. Dejar que se cocine todo un poco, y si se desea, añadir un poco de sal para que la cebolla largue más fácilmente sus jugos.
Con la cebolla y los ajos cociéndose, ha llegado el turno de la cebolleta y los pimientos. En el caso de la cebolleta, se la debe pelar y picar antes de cocinarla. En cuanto a los pimientos verde y rojo, se deben lavar, retirar el cabo y quitar todas las semillas de su interior. Luego, picarlos en cuadrados y añadirlos junto a la cebolleta a la sartén para que se cocinen con el resto de los ingredientes.
Una vez los ajos han tomado su color y la cebolla, la cebolleta y los pimientos se han cocido y ablandado un poco, es momento de añadir los 600 gramos de tomate natural triturado en conserva. Con el tomate ya incorporado a la sartén, es importante añadir a toda la mezcla una pizca de sal y de azúcar, y con los ingredientes ya sazonados, sólo queda dejar que se cocine todo durante unos 30 minutos aproximadamente.
Luego de media hora cocinando los vegetales con la salsa de tomate, es momento de añadir los huevos a la mezcla. Para ello, se deben cascar los huevos sobre el borde de la sartén, sumarlos sobre la salsa de tomate y, en caso de que la sartén cuente con una tapa, colocarla por encima. Es importante que los huevos se introduzcan en la sartén con sumo cuidado para evitar así que las yemas se rompan y se esparzan por toda la salsa de tomate.
Pasados unos 8 minutos aproximadamente, las claras de los huevos ya estarán listas. Es importante aclarar que su cocción puede llevar entre unos 8 a 10 minutos y, por supuesto, si se cocinan los huevos con la tapa puesta, la cocción será más rápida. En cuanto los huevos tengan el punto deseado, es momento de apagar el fuego y retirar. Es importante que se deje reposar la preparación unos dos minutos aproximadamente antes de servir.
Mientras la shakshuka reposa, se puede picar un poco de perejil fresco para espolvorear por encima. Esto no solamente aportará color a la presentación del plato, sino que también va a sumar sabor, aroma y frescura a los huevos en salsa de tomate. Finalmente, os recomendamos acompañar este delicioso plato con un trozo de pan, que mojado en la salsa con los huevos quedará increíble.
Como habéis podido observar, preparar estos deliciosos huevos en salsa de tomate es muy fácil y os podemos asegurar que todos los comensales estarán encantados. Si os ha gustado este plato y deseáis aprender a hacer otras recetas con huevos, no os podéis perder el paso a paso que hemos preparado para hacer los famosos y clásicos huevos Benedictinos, con su salsa holandesa y panceta. Una receta imprescindible para acompañar un buen brunch.
Mojito sin alcohol
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