La gelatina es un dulce de frutas que no necesita presentación. Sin embargo, si quieres hacerla en casa, debes conocer algunos trucos y consejos para garantizar unos resultados perfectos. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber para preparar gelatina.
Foto iStock
Consejos para hacer la gelatina perfecta
Si te apetece hacer gelatina en casa, pero tienes dudas sobre el proceso o los pasos básicos para crear la gelatina perfecta, estás en el lugar adecuado. Además, la distinción entre gelatina y mermelada puede resultar confusa. Si no estás seguro de las diferencias, te recomendamos que leas nuestro artículo titulado "¿Cuál es la diferencia entre mermelada y gelatina?", que te ayudará a distinguirlas perfectamente.
Lo que necesitas
Si quieres aprender a hacer gelatina rápidamente, este artículo te será muy útil. Sin embargo, si quieres conocer el proceso completo para hacer gelatina desde cero, normalmente necesitarás el siguiente equipo:
- Una olla grande: para cocinar la mezcla de frutas.
- Un tamiz fino o bolsa para gelatina: para colar la fruta y obtener un zumo claro.
- Tazas o cucharas medidoras: para medir los ingredientes con precisión.
- Tarros y tapas: tarros esterilizados para conservar la gelatina.
- Un embudo y un cucharón para tarros: para echar la gelatina sin que se derrame.
- Un termómetro (opcional): para saber el punto de cocción de la gelatina.
Qué es la gelatina
La gelatina se prepara cociendo zumo de fruta con azúcar y ácido. El zumo se extrae hirviendo fruta triturada o trozos de fruta en agua hasta que se ablandan, tras lo cual la pulpa y las cáscaras se separan del zumo utilizando un tamiz para eliminar cualquier resto de fruta o semillas, lo que da como resultado una pasta untuosa, suave y transparente. La textura de la gelatina no es suelta como la de la mermelada o las conservas, sino parecida a la de la jalea. La gelatina se puede preparar con o sin pectina, pero la mayoría de las recetas la incluyen, ya que una buena gelatina debe tener suficiente fuerza gelificante para conservar su forma y textura firme.
Trucos para hacer la gelatina perfecta
Hacer la gelatina perfecta es un arte que combina precisión con técnicas básicas. En primer lugar, utiliza siempre fruta fresca de alta calidad para obtener el mejor sabor y contenido natural de pectina. Si la fruta está demasiado madura es posible que el sabor sea más apagado y cuaje peor. Si añades pectina, debe estar bien integrada con el azúcar antes de mezclarla con el zumo de frutas para evitar que se apelmace. Durante la cocción, mantén el hervor constante y no la remuevas demasiado, ya que se podría descomponer la pectina y la gelatina no cuajaría bien. Es fundamental comprobar si la gelatina está lista; utiliza la prueba del plato frío para mayor precisión. Cuando haya cuajado, retírala inmediatamente del fuego para que no se cocine en exceso. Cuando la viertas en tarros, deja un pequeño espacio en la parte superior para permitir la expansión a medida que la gelatina se enfríe y cuaje. Por último, guarda la gelatina en un lugar fresco y oscuro para conservar su sabor y consistencia. Con estos consejos, conseguirás siempre una gelatina deliciosa y perfectamente cuajada.
¿Cómo se hace la gelatina?
Lava y trocea la fruta. Si utiliza frutas con alto contenido en pectina, puedes incluir algunas frutas poco maduras, ya que tienen mayor contenido en pectina. Cuece la fruta a fuego lento con agua hasta que esté blanda.
Utiliza un colador o una bolsa de gelatina para colar el zumo de la fruta cocida. Mide el zumo y añádele azúcar (y pectina, si es necesario) siguiendo la receta. Cuece la mezcla hasta que cuaje. Puedes comprobarlo dejando caer un poco de gelatina sobre un plato frío: debería arrugarse al presionarla. Vierte la gelatina caliente en tarros esterilizados y ciérralos.
Ingredientes típicos de la gelatina
- Fruta: puedes usar la que más te guste. Las más comunes son las fresas, las frambuesas, las uvas y las moras. Puedes utilizar fruta fresca o congelada.
- Azúcar: se utiliza para endulzar la gelatina y ayudar a que cuaje.
- Pectina: la pectina, un agente endurecedor natural de la fruta, se suele añadir para que la gelatina cuaje correctamente. Algunas frutas tienen altos niveles de pectina natural (como las manzanas y los cítricos), mientras que otras necesitan pectina adicional.
- Zumo de limón: si la fruta tiene poca acidez, añadir zumo de limón puede ayudar al proceso de cuajado.
- Agua: se utiliza para extraer el zumo de la fruta.
Para demostrar que una imagen vale más que mil palabras, te ofrecemos un sencillo tutorial en vídeo de seis minutos de duración. Este tutorial cuenta con el brillante chef indio Atul Kochhar, que te guiará a lo largo del proceso con consejos y técnicas expertas.
El chef Atul Kochhar empieza desde cero, utilizando las frutas de verano más frescas y un chorrito de licor de flor de saúco para darle vida a tu gelatina casera. Es como tener un programa de cocina privado y una guía práctica, todo en uno. Así que es hora de remangarse y transformar la cocina en el paraíso de la gelatina con este fantástico tutorial audiovisual.