El primer paso consiste en remojar las alubias. Si hemos conseguido alubias secas, lo mejor será remojarlas por al menos 8 horas. De lo contrario, con dejarlas en agua durante 1 hora será suficiente.
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sirve para
Tiempo Total
Ingredientes
Elaboración
Step 01
Step 02
Lo siguiente será lavar bien y partir directamente con las manos los grelos, para llevarlos a hervir durante un par de minutos. Esta pre cocción sirve fundamentalmente para quitarle el sabor amargo original de los grelos.
Step 03
Luego, en otro recipiente un poco más grande llevar agua a hervir y añadir las alubias. Cuando el agua llegue al punto de hervor, agregar también el tocino o la panceta, junto con los huesos de jamón y caña de ternera. Cocinar esta mezcla a fuego bajo por aproximadamente 45 minutos.
Step 04
Mientras las alubias y los huesos se cocinan, cortar en trozos pequeños las patatas y sumarlos a la cocción cuando hayan pasado los 45 minutos, junto también con los grelos previamente pre cocidos.
Step 05
Continuar cocinando todo el caldo por unos 15 ó 20 minutos más, hasta que las papas estén blandas. Añadir un poco de sal, y otros condimentos de vuestro gusto, y retirar los huesos para servir este caldo gallego.
Notas y consejos para hacer caldo gallego
El caldo gallego, tal como lo indica su nombre, es un plato típico de la región de Galicia, en España. Ideal para los meses más fríos del año, ya que nada mejor que ingerir un caldo tan calórico y potente cuando las temperaturas bajan. Si bien aquí os hemos presentado la clásica versión de este caldo, tened en cuenta que siempre podéis añadir otras verduras de temporada, tales como coliflor o repollo blanco, fabas, col rizada, berzas, entre otras, así como otros tipos de carne, e incluso hasta grasa de cerdo. Las alubias también pueden reemplazarse con habas u otro tipo de porotos similares, teniendo en cuenta siempre que, si los compramos secos, es muy importante que se remojen durante varias horas, y de ser posible durante toda la noche.
Un buen tip a tener en cuenta es que este tipo de caldos o sopas siempre saben mejor al día siguiente. Así que lo podéis preparar con antelación será lo ideal. Otro aspecto a tener en cuenta es la potencia de la cocción. Para que los ingredientes se integren bien y desplieguen todos sus sabores, lo mejor será siempre cocinar este caldo muy lentamente, a fuego bien bajo.
Para quienes gustan de un caldo con una consistencia más espesa, un buen truco consiste en rallar alguna patata cuando ya esté cocida y añadirla a la mezcla, o esmagar un par de alubias con la ayuda de un tenedor, hasta que estén bien deshechas. Ahora bien, si también preferimos que el resultado final no sea tan grasoso, podemos hervir previamente la carne o huesos que utilicemos en nuestro caldo, simplemente para que desprendan algo de su grasa previamente y no en nuestro caldo.
Por último, una recomendación que puede hacer que el caldo sea mucho más sabroso es comprar productos frescos y de calidad. Como en general no se trata de un plato excesivamente caro, nos podemos dar el lujo de gastar un poco más de dinero comprando muy buenas verduras y carnes.
Leche dorada (Golden Milk)
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