En otras ocasiones ya os hemos contado sobre los beneficios, usos y propiedades nutricionales de las frutas rojas, y también hemos hablado específicamente de las fresas. Pero éstas no son las únicas frutas rojas que puedes comer durante la primavera. Aquí os vamos a contar más todo sobre otra deliciosa y muy conocida fruta: la cereza. Os invitamos a conocer más sobre esta maravillosa fruta, desde sus orígenes, pasando por sus propiedades nutricionales, y también, algunas de nuestras recetas favoritas.
Origen de las cerezas
Las cerezas son un alimento conocido desde tiempos prehistóricos. Ha sido una fruta consumida y muy apreciada desde la Edad Antigua. Se cree que el origen del cerezo dulce se dio en la región conocida como Asia Menor, en cercanías del Mar Negro y el Mar Caspio, y que luego su diseminación hacia Europa y Asia ha sido por medio de las aves y migraciones humanas. La mayor parte de las especies del árbol del cerezo que se cultivan en la actualidad en Europa y se pueden dividir en cerezas dulces (Prunus avium) y agrias (Prunus cerasus).
Se sabe que los romanos conocían muy bien las técnicas de injerto y por ello, fueron capaces de crear nuevas variedades de cerezas que se expandieron por todo el Imperio. Sin embargo, existen registros de consumo de la cereza que son aún más antiguos que el de los romanos: según hallazgos, se conoce que alrededor del año 6000 a.C., las cerezas se majaban para obtener un líquido que se fermentaba y se convertía en alcohol. Más adelante, se le atribuye al cónsul romano Licinio Lúculo la introducción del cerezo en la península itálica y el resto de Europa.
En la actualidad, el cerezo se cultiva en numerosas regiones y países del mundo con clima templado, siendo los países de mayor producción Irán, Rusia, Turquía, Chile, Estados Unidos, Alemania, Italia, Francia y España.
Más populares cerezas: tipos y características
A continuación os presentamos los tipos de cerezas más populares que podréis encontrar en las góndolas en esta temporada.
Bing: estas cerezas son de tamaño medio a grande, de color rojo oscuro, piel firme y muy carnosas. Es una de las variedades más buscadas entre los consumidores debido a su dulce sabor. Originaria del Estado de Oregón, en Estados Unidos, también se cultiva en otras regiones del Pacífico Norte. De hecho, la Bing es la variedad más cultivada y consumida en Estados Unidos.
Burlat: es la variedad que más se ha expandido y es la más cultivada entre las existentes. Se distinguen por su piel y carne de color rojo oscuro. Son cerezas firmes y jugosas, de un tamaño mediano. Tiene un buen sabor y supera en resistencia al cracking a la mayoría de variedades de su época.
Cristobalina: es de origen español y es una de las variedades con menos necesidades de frío que existe en el mundo. Es autofértil y tiene una buena capacidad productiva. Sin embargo, tiene un tamaño muy pequeño que impide su plantación a escala comercial. Es adecuada para consumo personal en zonas con escasas horas frío.
Early Burlat: esta es la variedad temprana de cerezas por excelencia y una de las más cultivadas en Europa. Como las Burlat, se distinguen por su piel y carne de color rojo oscuro. Son cerezas firmes y jugosas, de un tamaño mediano.
Marvin: auto estéril y altamente sensible al cracking. Es un poco mejor que la variedad Burlat en cuanto a presencia de frutos dobles.
Lapins: se obtiene de la cruza de las variedades Stella y Van. Su origen es canadiense y se cultivó por primera vez en el año 1983. Es de tamaño mediano, y tanto su piel como su carne son de color rojo oscuro. Actualmente, es la más plantada del mundo y una de las más comercializadas debido a su alta productividad y su sabor dulce.
Van: también son de origen canadiense, y es una variedad muy cultivada debido a sus características y adaptación. Es de gran sabor, color rojo muy intenso y ausencia de pedúnculo. Es una variedad que se ha extendido en España por su alta productividad. Es un fruto firme y de buena resistencia al cracking.
Cerezas: propiedades, beneficios y valor nutricional
La cereza, además de deliciosa, tiene una gran variedad de propiedades y beneficios para nuestro organismo, pues se destaca por su contenido en potasio, un mineral que favorece la formación de orina, y también por su contenido de fibras. Es importante aclarar que aquellas cerezas que son más oscuras son aquellas más ricas en hierro, magnesio y potasio que las variedades más claras.
En cuanto a su contenido vitamínico, la cereza es rica en vitaminas A y C. Destaca asimismo por su riqueza en antocianos, unos pigmentos que además de dar color, poseen un alto poder antioxidante.
Las cerezas tienen propiedades antiinflamatorias gracias a sus componentes depurativos y antioxidantes, así como a la presencia de ácido salicílico, por eso, su consumo es bueno para aquellas personas con reumatismo y artritis. Se recomiendan también en dietas cuyo fin es la reducción de peso, por su efecto saciante, laxante y diurético. Esto se debe a su contenido de fibra, agua y potasio, así como al bajo aporte de lípidos y sodio.
Los componentes de esta fruta depuran el organismo y protegen el sistema nervioso y vascular, por eso, es una de las frutas consideradas como óptimas para el antienvejecimiento. Reducen el riesgo de aparición de diabetes y sus complicaciones por su contenido en fructosa y levulosa. A su vez, el consumo de cerezas ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, evitando también la formación de cálculos biliares y, por lo tanto, ayuda también a evitar trastornos hepáticos.
La cereza contiene varios componentes fenólicos que protegen al sistema cardiovascular.
También es buena para combatir trastornos intestinales, y a su vez, ayuda a rebajar los niveles de ácido úrico.
Si bien las cerezas son frutas muy saludables, su consumo excesivo, sobre todo en personas con dificultades digestivas, puede acarrear riesgos debido a su contenido de ácido oxálico.
Recetas y bebidas con cerezas
Ahora que conocéis un poco más sobre las cerezas, sus variedades y beneficios, os estaréis preguntando cómo se pueden consumirlas, además de frescas. Existen innumerables recetas para hacer con cerezas, ya sea en postres, ensaladas, salsas y bebidas. Aquí os presentamos unas recetas para que intentéis en casa y os deleites con su sabor.
Tarta Selva Negra
Este postre típico proveniente de Alemania, aunque también muy consumido en Austria, Suiza e Italia, puede parecer difícil de preparar, pero os sorprenderá lo fácil que es. Solo hay que seguir el paso a paso aquí propuesto para hacer la mejor tarta Selva Negra. Inténtadlo y disfrutad esta delicia.
Singapore Sling
Creado a principios de siglo XX en Singapur, os presentamos aquí el cóctel Singapore Sling. Seguid el paso a paso, y en 5 minutos obtendréis un trago clásico y delicioso.
Cómo conservar las cerezas
Para conservar adecuadamente las cerezas, se recomienda no cambiar bruscamente su temperatura. Idealmente, deben conservarse en la nevera, sin estar amontonadas. Vale recordar que no deben ser lavadas antes de guardarlas, pues esto acelerará su proceso de putrefacción. Se las puede cubrir con un paño, como también utilizar una bolsa de plástico cerrada o un tupper hermético, ya que de esta forma pueden durar hasta 2 semanas en perfectas condiciones. Para conservar las cerezas durante más tiempo, también pueden ser congeladas. Luego de su recolección, las cerezas no aumentarán su dulzor, por eso, es recomendado su consumo luego de ser elegidas en góndola y en su punto.