¿Quieres consumir menos sal o, simplemente, se te ha olvidado comprar y buscas una alternativa? La sal es indispensable en la cocina, de hecho, es un potenciador natural del sabor y renunciar a ella no es una buena idea. He aquí una guía práctica para elegir alternativas a la sal de mesa.
¡Descubre en el vídeo cómo arreglar un plato demasiado salado!
¿Es la sal mala para la salud?
La respuesta es no. La pregunta que hay que hacerse es: ¿tomar demasiada sal es malo para la salud? En ese caso, la respuesta cambia. Sí, el exceso de sal es malo para la salud. Por eso hay que dosificarla de forma inteligente, teniendo en cuenta que muchos alimentos son salados por naturaleza. La alternativa son los sustitutos de la sal, que suelen ser más saludables.
¿Cuánta sal hay que utilizar?
La Organización Mundial de la Salud recomienda no consumir más de 5 gramos de sal al día, es decir, 2 gramos de sodio. En resumen, no debemos consumir más de una cucharadita.
Sustitutos de la sal
Sustitutos de la sal: hierbas aromáticas
Las hierbas aromáticas son un excelente sustituto de la sal desde el punto de vista del sabor. ¿Cuál elegir? Sin duda, la salvia ofrece un sabor muy agradable e intenso, al igual que el tomillo. Pero otras hierbas que sustituyen bien a la sal son:
Eneldo: aroma dulce y sabor picante
Romero: especiado y refrescante
Cilantro: sabor cítrico y picante
Sustitutos de la sal: especias
Hay muchos sustitutos de la sal en el vasto mundo de las especias. Podemos empezar por el pimentón ahumado, con un intenso sabor picante. La canela y el curry también son excelentes. Por cierto: este último es una mezcla de especias y no una sola como muchos creen.
Sustitutos de la sal: pimienta y guindilla
Darle a la comida un toque picante es una excelente forma de reducir el consumo de sal. La pimienta negra, con su sabor picante, los granos de pimienta rosa, con su aroma cítrico, y, por último, la guindilla, le darán a tu plato el punto picante justo sin tener que abusar de la sal.
Otros sustitutos de la sal
Otros sustitutos de la sal son el gomasio, una mezcla de sésamo blanco tostado y especias perfecta para sazonar verduras y ensaladas. También es excelente la levadura nutricional, cuyo sabor umami recuerda al del queso curado. También puedes aportar un toque salado con vinagre y las notas agridulces del vinagre balsámico, pero procura de pasarte. Otras alternativas a la sal proceden de la huerta y son los tomates secos, con un sabor umami, ácido y picante, y las alcaparras, cuyo fuerte sabor le da personalidad a platos crudos y cocinados. Del mar, para sustituir la sal, vienen las anchoas, que también son estupendas si se usan con verduras y carne. Por último, otras dos alternativas a la sal son la salsa de soja, que, sin embargo, contiene mucho sodio, y los aminos de coco, una sustancia obtenida del coco con un fuerte sabor salado.
Descubre cómo sustituir la sal con la infografía que aparece a continuación.