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La ratatouille tiene su origen en la cocina provenzal francesa, en concreto, en la de Niza. Se trataba de un plato muy humilde, que aprovechaba las verduras que sobraban e incluso, a veces, los desperdicios de estas. Dichas verduras se cocinaban en una olla a fuego lento durante horas, tal y como sugiere su nombre, ya que “rata” significa “comida” y, “touille”, “remover”. Hoy en día, la ratatouille es un plato muy popular en toda Europa, del que existen cantidad de variantes. La receta tradicional incluye ajo, cebolla, pimientos, tomates y también berenjena y calabacín.
Vamos a ver cuáles son los pasos a seguir para preparar una perfecta ratatouille de verduras al horno.
Este delicioso plato provenzal a base de verduras, aderezado con una mezcla de hierbas aromáticas, se puede cocinar de diferentes maneras (en una cazuela, al horno, cocinando cada verdura por separado…) y se puede comer tanto caliente como frío, casi siempre como guarnición de carnes y pescados. A continuación, te proponemos la receta de la ratatouille al horno, que es la versión más ligera y saludable de este plato, sin, por supuesto, renunciar al sabor.
Empieza por cortar la berenjena en rebanadas de aprox. medio centímetro de espesor, luego, ponlas en un cuenco con sal durante media hora para que pierdan el amargor. Mientras tanto, ve cortando el resto de las hortalizas, siempre en rebanadas de medio centímetro, y pica el ajo bien fino. Precalienta el horno a 180º C.
En una fuente apta para horno con bordes altos, pincelada con aceite, coloca las verduras en vertical, empezando por el borde y yendo hacia el centro, alternando los tipos de verduras y colores, hasta formar una espiral. Las verduras deben mantenerse verticales, pero sin estar muy apretadas, por lo que procura que la fuente no sea demasiado grande, ni demasiado pequeña.
Pica las hierbas aromáticas. En un cuenco mezcla unas tres o cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra con las hierbas frescas picadas y el ajo picado, y adereza las verduras con esta mezcla. Salpimienta al gusto.
Coloca la fuente en el horno precalentado a 180°C. La rejilla debe estar en la parte más baja del horno para que las verduras no se nos doren demasiado. Hornea durante aproximadamente 40 minutos, o hasta que las verduras estén tiernas.
Para que la ratatouille te quede perfecta, sigue estos sencillos consejos:
- Usa verduras frescas: los calabacines y la berenjena deben tener una textura bien firme, los pimientos deben estar brillantes y lisos, los tomates maduros.
- Prepara tú mismo la mezcla de hierbas aromáticas en vez de adquirirla ya preparada en los supermercados.
- Si tu horno se calienta mucho por arriba, puedes bajar la temperatura a 160°C o cubrir las verduras con papel de horno durante los primeros 25 minutos.
- Recuerda que al día siguiente la ratatouille estará todavía más rica y sabrosa, ya que habrá absorbido todo el aroma de las hierbas y los sabores se habrán mezclado a la perfección.
La ratatouille es un acompañamiento muy versátil, que combina muy bien con platos de pollo, pescado y carne. ¿Algunas ideas? Ratatouille con salmón a la plancha, si buscas un plato ligero pero sofisticado, o bien con pollo al horno o can carne asada para un plato más suculento. Pero las opciones no acaban allí: también puede servirse con arroz o pasta corta, e incluso con ensaladas.
La ratatouille se puede comer tanto caliente como fría y, si quieres conservarla, puedes almacenarla en la nevera hasta cuatro días en un contenedor hermético. También es posible congelar la preparación, colocándola en una bolsa para freezer o en un contenedor hermético. Allí podrás conservarla hasta cuatro meses. Cuando quieras utilizar tu ratatouille, recuerda colocarla en la nevera un día antes para que se descongele.
