Para la trucha:
Retirar las espinas y la raspa de la trucha, hacer agua salada al 6% y dejar reposar los filetes durante 9 minutos.
Retirar la piel de los filetes.
Envolver los filetes en film transparente con la piel hacia abajo y poner los filetes sin piel uno encima de otro.
Envolverlos bien y bañarlos en agua a 49 grados durante 15 minutos.
Abrir y freír a continuación.
Asegúrate de que la piel esté gustosa y crujiente.